Receta de Croquetas de Queso Manchego al estilo de Alcalá del Júcar
Las croquetas de queso manchego son un manjar tradicional en Castilla-La Mancha, y en localidades como Alcalá del Júcar, se disfrutan como tapa o entrante en los bares y hogares. Estas croquetas combinan la cremosidad de la bechamel con el intenso sabor del queso manchego curado, ofreciendo un bocado crujiente por fuera y suave por dentro.
Ingredientes:
- 200g de queso manchego curado, rallado
- 50g de mantequilla
- 50g de harina de trigo
- 500ml de leche entera
- 1 pizca de nuez moscada
- Sal y pimienta al gusto
- 2 huevos
- 100g de pan rallado
- Harina extra para rebozar
- Aceite de oliva virgen extra para freír

Alcalá del Júcar es un pintoresco pueblo situado en la provincia de Albacete, en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, en el centro de España. Este encantador lugar es conocido por su impresionante castillo árabe, sus casas cueva y su espectacular paisaje fluvial, lo que lo convierte en un destino turístico ideal para aquellos que buscan una experiencia única en España.
Preparación:
- En una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio y añade la harina. Cocina durante unos minutos removiendo constantemente para que la harina pierda el sabor a crudo.
- Incorpora la leche poco a poco sin dejar de remover, asegurándote de que no queden grumos.
- Añade el queso manchego rallado y remueve hasta que se derrita completamente y la mezcla espese.
- Agrega una pizca de nuez moscada, sal y pimienta al gusto. Cocina unos minutos más hasta que la bechamel esté bien integrada y homogénea.
- Vierte la masa en una bandeja y deja enfriar a temperatura ambiente. Luego, cúbrela con film transparente y refrigérala durante al menos 3 horas (mejor si es de un día para otro).
- Con las manos enharinadas, forma croquetas de tamaño uniforme.
- Pásalas por harina, luego por huevo batido y finalmente por pan rallado.
- Calienta abundante aceite de oliva virgen extra en una sartén y fríe las croquetas hasta que estén doradas y crujientes.
- Colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite y sírvelas calientes.
Consejos de salud:
El queso manchego es una excelente fuente de calcio y proteínas, aunque su contenido en grasa puede ser alto. Para una versión más ligera, puedes optar por hornear las croquetas en lugar de freírlas. También puedes utilizar leche semidesnatada o desnatada para reducir el contenido calórico sin sacrificar demasiado sabor.
Contexto cultural:
Alcalá del Júcar, un pintoresco pueblo de Albacete, es famoso por su impresionante paisaje montañoso y su gastronomía basada en productos locales. El queso manchego, elaborado con leche de oveja de la región, es un emblema de la cocina castellano-manchega y se disfruta en muchas formas, desde tapas hasta platos más elaborados como estas croquetas. Degustarlas con un vino tinto de La Mancha o una cerveza artesanal de la zona es una experiencia que captura la esencia de la tradición culinaria local.