Receta de Poutine con Carne Fumada de Montreal

Receta de Poutine con Carne Fumada de Montreal

El poutine es una delicia canadiense que se originó en Quebec y ha ganado popularidad en todo el mundo. Este plato tradicional combina papas fritas, queso cheddar derretido y salsa de carne (sauce gravy). Al introducir la carne fumada típica de Montreal, le damos a este clásico un toque distintivo lleno de sabor.

Ingredientes:

• 5 papas grandes para hacer papas fritas
• 1 kg de queso cheddar rallado o en cubos
• 2 tazas de salsa de carne (sauce gravy)
• 500g de carne fumada de Montreal, cortada en rodajas finas

Preparación:

1. Lava y corta las papas en cubos de aproximadamente 2 cm de tamaño. Enjuaga con agua fría para detener el cocinado y luego deja secarlas completamente.
2. Calienta suficiente aceite para freír las papas en una sartén o freidora a aproximadamente 175°C. Añade las papas en lotes y cocina hasta que estén doradas y crujientes, generalmente alrededor de 15-20 minutos. Retira con una espumadera y escurre en papel absorbente.
3. En una olla a fuego medio, derrite el queso cheddar lentamente mientras revuelves constantemente para evitar que se queme. Agrega la salsa de carne y mezcla bien hasta que el queso esté completamente derretido y la combinación esté homogénea.
4. Coloca las papas fritas en platos y distribuye generosamente el queso derretido y caliente sobre ellas. Esparce las rodajas de carne fumada de Montreal por todo el plato.
5. Sirve tu poutine con carne fumada y disfruta de la combinación única de sabores y texturas.

Consejos de salud:

Este poutine es una delicia, pero debido al alto contenido de grasa y calorías, se recomienda moderación. El queso cheddar y la carne fumada son buenas fuentes de proteínas y calcio. Sin embargo, aquellos con cuidado cardíaco pueden optar por un queso bajo en grasa o buscar alternativas más saludables para reducir el impacto en su dieta.

Contexto cultural:

Montreal es famosa por su carne fumada, una tradición que ha influenciado la gastronomía local y global. Este plato refleja la fusión de sabores canadienses con influencias internacionales. El poutine, originalmente asociado con Quebec, ha evolucionado a través del tiempo y se ha convertido en un símbolo de la cocina casual y reconfortante de Canadá, apreciado en hogares y restaurantes por igual.