
Receta de Trucha al horno con Champiñones y Salsa de Remolacha
La trucha del lago Bern es un pescado de agua dulce apreciado por su textura firme y sabor delicado. Este plato combina la trucha con champiñones frescos y una salsa cremosa a base de remolacha, ofreciendo una experiencia culinaria rica en sabor y color.
Ingredientes:
- 4 filetes de trucha del lago Bern (aproximadamente 200g cada uno)
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 4 champiñones grandes, lavados y cortados en láminas
- 1 cebolla morada, finamente picada
- 1 diente de ajo, finamente picado
- 2 cucharadas de salsa de remolacha (comprada o hecha casera)
- 1 cucharada de vino blanco seco
- 1/4 taza de crema agria
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
- Calienta el horno a 180°C (350°F). En una bandeja para hornear, coloca los filetes de trucha y rocíalos con aceite de oliva. Salpimienta ambos lados y hornea durante 12-15 minutos, hasta que la trucha esté cocida pero jugosa.
- Mientras la trucha se cocina, calienta una sartén grande con un poco de aceite. Agrega los champiñones y la cebolla morada. Cocina a fuego medio hasta que estén tiernos y dorados, aproximadamente 7-8 minutos.
- En un tazón, mezcla la salsa de remolacha, el vino blanco, la crema agria, y el ajo. Agrega sal y pimienta al gusto.
- Una vez que la trucha esté lista, retira los filetes del horno. Sirve cada filete sobre una porción de champiñones y cebolla. Espolvorea generosamente con la salsa de remolacha y sirve inmediatamente para disfrutar del sabor fresco de la trucha.
Consejos de salud:
La trucha es una fuente de proteínas magras y es baja en grasas saturadas, lo que la hace ideal para aquellos que buscan opciones de pescado más saludables. La salsa de remolacha agrega un toque vibrante de nutrientes antioxidantes, mientras que los champiñones aportan fibra y otros beneficios nutricionales.
Contexto cultural:
La trucha del lago Bern es nativa de Suiza, donde se ha criado en granjas desde hace décadas para su consumo. Este pescado es un ingrediente común en muchas cocinas locales, pero adaptarse a preparaciones más sofisticadas como esta muestra cómo los productos agrícolas regionales pueden ser elevados a platos gourmet. En Berna y en otras partes de Suiza, la comida tiende a ser simple pero deliciosa, enfocada en resaltar la calidad de los ingredientes locales.

Bern, la capital de Suiza, es una ciudad llena de encanto y belleza que no puedes dejar de visitar. Situada a orillas del río Aar, Bern es conocida por su arquitectura medieval bien conservada, su rica historia y su ambiente relajado. Aquí encontrarás una combinación perfecta entre lo antiguo y lo moderno, lo histórico y lo contemporáneo.