Receta de Mejillones al Albariño, especialidad de Fisterra, España
Los mejillones al Albariño son un plato clásico de la gastronomía gallega, especialmente en la zona de Fisterra. Se trata de una receta sencilla pero llena de sabor, donde el vino Albariño realza el gusto de los mejillones frescos del Atlántico. Es un plato ideal como entrante o acompañamiento, representando la esencia marina de la región.
Ingredientes:
- 1 kg de mejillones frescos
- 250 ml de vino Albariño
- 2 dientes de ajo, finamente picados
- 1 cebolla pequeña, picada en brunoise
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 hoja de laurel
- ½ cucharadita de pimentón dulce
- Perejil fresco picado (al gusto)
- Sal y pimienta al gusto
- Rodajas de pan para acompañar
Ubicado en la provincia de A Coruña, en la región de Galicia, Fisterra es un destino turístico único que ofrece una mezcla de historia, cultura y belleza natural. Conocido como el «Fin del Mundo» durante la época romana, este pintoresco pueblo costero es un lugar de gran importancia histórica y espiritual.
Preparación:
- Limpia bien los mejillones, eliminando las barbas y lavándolos con agua fría.
- En una olla grande, calienta el aceite de oliva y sofríe la cebolla y el ajo a fuego medio hasta que estén tiernos.
- Añade el pimentón dulce y remueve rápidamente para que no se queme.
- Incorpora los mejillones junto con el vino Albariño y la hoja de laurel.
- Cubre la olla y cocina a fuego medio-alto durante 5-7 minutos, hasta que los mejillones se abran. Descarta los que no se abran.
- Ajusta la sal y la pimienta al gusto.
- Espolvorea con perejil fresco picado y sirve caliente, acompañado de pan para mojar en la deliciosa salsa.
Consejos de salud:
Los mejillones son una excelente fuente de proteínas, hierro y ácidos grasos omega-3, beneficiosos para la salud cardiovascular. Además, el vino Albariño aporta antioxidantes naturales. Para una versión más ligera, se puede reducir la cantidad de aceite de oliva.
Contexto cultural:
Fisterra, situada en la Costa da Morte de Galicia, es conocida por su impresionante paisaje marítimo y su rica tradición pesquera. Los mejillones gallegos son considerados de los mejores del mundo, gracias a las rías que proporcionan un hábitat óptimo para su crecimiento. El vino Albariño, característico de la región, complementa a la perfección los sabores del mar, convirtiendo este plato en una joya de la cocina gallega.