Receta de Tarta de Santiago con un Toque de Cangas, España

Receta de Tarta de Santiago con un Toque de Cangas, España

La Tarta de Santiago es un postre tradicional de Galicia, España, conocida por su sabor a almendras y textura crujiente. En la comarca de Cangas, este dulce recibe un toque especial al incorporar ingredientes locales, como el almendrón gallego, para darle una singularidad que lo hace único en la región.

Ingredientes:

• 250g de almendra molida (almendra gallega preferiblemente)
• 125g de azúcar
• 3 huevos
• 20g de harina
• Un chorrito de esencia de vainilla
• 1 cucharadita de canela en polvo
• Una pizca de sal

Preparación:

1. Precalienta el horno a 180°C (350°F). Engrasa un molde redondo para tartas.
2. En un bol grande, mezcla la almendra molida y el azúcar hasta que estén bien incorporados.
3. Añade los huevos uno a uno, batiendo bien entre cada adición, para evitar que la mezcla se espese demasiado.
4. Incorporad la esencia de vainilla, la canela en polvo y una pizca de sal al mix. Mezcla hasta obtener una masa homogénea.
5. Vierte la masa en el molde preparado. Haz un agujero en el centro de la masa para que suba durante la horneado.
6. Hornea durante aproximadamente 35-40 minutos, o hasta que la tarta esté dorada y esté lista para enfriar sobre una rejilla.
7. Dejar enfriar completamente antes de servir. La Tarta de Santiago está lista para degustar en su forma tradicional.

Consejos de salud:

La Tarta de Santiago es un postre rico y dulce, pero si se consume con moderación puede formar parte de una dieta equilibrada. Los ingredientes naturales como la almendra y el azúcar tienen sus beneficiosos efectos en la nutrición. Para quienes siguen una dieta baja en grasas o carbohidratos, esta tarta puede ser disfrutada ocasionalmente como parte de un plan alimenticio saludable.

Contexto cultural:

Cangas, en la provincia de Ourense, Galicia, es conocida por su rica tradición culinaria que incluye el uso de ingredientes locales. Al adaptar una receta tradicional como la Tarta de Santiago con elementos locales del almendrón gallego, se rinde homenaje a la diversidad regional y la creatividad local. Este toque personaliza el postre no solo en sabor, sino también en historia, haciendo de cada pieza un testimonio de la identidad gastronómica de la región.