Receta de Trucha del Río para Ordesa en Salsa de Champiñones

Receta de Trucha del Río para Ordesa en Salsa de Champiñones

La trucha del río Ordesa es una variedad de trucha típica de la zona pirenaica española, reconocida por su sabor suave y carne firme. Este plato es ideal para disfrutar de la trucha de forma gourmet, complementada con una salsa cremosa de champiñones que realza sus cualidades.

Ingredientes:

• 4 filetes de trucha del río Ordesa (aproximadamente 150g cada uno)
• 200g de champiñones frescos, cortados en láminas
• 2 dientes de ajo, picados
• 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
• 100ml de nata para cocinar
• 1 cucharada de harina
• Sal y pimienta al gusto
• 2 hojas de laurel

Preparación:

1. Calienta el aceite en una sartén antiadherente a fuego medio. Agrega los champiñones y cocina hasta que estén tiernos, aproximadamente 5 minutos.
2. Agrega el ajo y saltea por un minuto más, hasta que esté suave pero no dorado.
3. Corta la nata en pedazos pequeños y vierte sobre los champiñones en la sartén. Agrega la harina poco a poco, moviendo constantemente para crear una salsa espesa y cremosa.
4. Sazona con sal y pimienta al gusto, añadiendo las hojas de laurel para aromatizar la salsa.
5. Una vez que la salsa esté bien cocida, reduce el fuego a mínimo y añade los filetes de trucha en el centro de la sartén. Cocina la trucha a fuego muy bajo hasta que ambos lados estén dorados y la carne esté a punto, aproximadamente 3-5 minutos por lado, dependiendo del grosor del filete.
6. Sirve la trucha con un generoso chorrito de la salsa de champiñones y decora con una hoja de laurel si se desea.

Consejos de salud:

La trucha es rica en proteínas magras, omega-3 y minerales esenciales como el calcio y hierro. La salsa de champiñones aporta vitaminas del grupo B y un bajo contenido de calorías. Para aquellos preocupados por la grasa, es aconsejable controlar el tiempo de cocción para evitar que se forme exceso de grasa en la sartén.

Contexto cultural:

La trucha del río Ordesa, como símbolo de la biodiversidad y riqueza natural de los Pirineos, es un ingrediente estrella en la gastronomía regional. Este plato, con su presentación sencilla pero sofisticada, captura la esencia de la cocina casera, donde la calidad de los ingredientes es el protagonista. El uso de la nata le da un toque gourmet, típico de las cocinas europeas, que busca destacar la pureza y sabor natural de los productos locales.